Los errores en contabilidad de una empresa, van desde cometer fallos aritméticos hasta sufrir fraudes que ocurrieron en periodos diferentes sobre el cual se informa.

El trabajo de contabilidad, es una práctica constante que deben llevar a cabo contadores calificados ya que se trata de una labor detallada y muy específica que, si no hace con el rigor obligatorio, puede derivar en diversos errores que pueden costar muy caros a las empresas. Sea por una razón o por la otra, se corre un riesgo grande de cometer errores sumamente costosos para la empresa. Noticiero Contable, enumeró algunos de los más típicos: no justificar gastos, para lo cual se debe llevar un registro de las compras que se hacen a nombre del negocio, ya que siempre es importante conseguir el mayor número posible de comprobantes, por más pequeñas que sean las compras. No tener al día los libros contables también es una típica falta administrativa que más temprano que tarde, traerá problemas a la empresa; incluso, afecta a los planes de expansión o promoción de la empresa. No imprimir los comprobantes o vouchers de las compras, es una práctica que no todos llevan, en este caso, es mejor contar con ambos registros (digital e impreso) para estar seguros que se tiene el total de la información. La caja chica puede convertirse en una fuga importante de dinero, si no es regulada correctamente; por lo tanto, es obligatorio llevar un registro preciso de hasta el último peso que salió de ella. Para evitar caer en cualquier tipo de error, surgieron las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF, por sus siglas), con las cuales se busca armonizar los principios contables de todos los comités de normas contables a nivel mundial, aseveró Gestión. Si bien dichas normas, fueron creadas para generar información de calidad para sus usuarios, accionistas, inversionistas, proveedores, clientes y público en general, es un hecho que la homologación de la información facilita los procesos de trabajo y facilita la toma de decisiones en diversos planos. De acuerdo con las NIIF, los errores contables corresponden a omisiones o inexactitudes en los estados financieros de una entidad con relación a uno o más periodos anteriores, sobre los cuales la información estaba disponible para esos periodos. Gerencie detalló que los errores pueden ir desde simples fallos aritméticos, pero también errores en la aplicación de políticas contables, así como inadvertencia de hechos económicos o una mala interpretación de tales hechos. Definitivamente no se debe dejar en manos inexpertas una labor tan importante como la contabilidad. Déjate apoyar por los expertos de CICDE y tu empresa gozará de una excelente salud administrativa, fiscal y contable.